El faro de cabo Villano señala uno de los tramos más peligrosos de la Costa de la Muerte, pero también de los más hermosos. Erguido a 125 metros de altitud y unido al antiguo edificio de los fareros, posee un potente cañón de luz capaz de alcanzar los 55 km. Es el faro eléctrico más antiguo de España, encendiéndose por vez primera el 15 de enero de 1896.
En 1890, el navío inglés Serpent, que navegaba hacia Sierra Leona, se hundió cerca de aquí a causa de un temporal. Perecieron 172 hombres, que están enterrados en el Cementerio de los Ingleses, a escasa distancia del faro. (Wikipedia)