Los Andes bolivianos tienen un interés especial porque presentan exposiciones casi completas del registro sedimentario desde el Paleozoico inferior hasta el reciente. Las investigaciones realizadas en los últimos años sobre estos conjuntos sedimentarios, han llevado a la elaboración de síntesis regionales muy ilustrativas (Sempere 1995, Suárez-Soruco 2000) que han modificado enormemente las visiones clásicas de la geología de esta región.
No obstante, estas síntesis no incluyen el análisis de las rocas magmáticas cuyo estudio aporta pautas importantes para reconocer los paleoambientes tectónicos y los procesos litosféricos profundos. La sedimentación y el magmatismo son los responsables de la transferencia de materia en la litósfera. La erosión y la sedimentación, si actúan por largos períodos, pueden transferir un gran volumen de masa rocosa de un lugar a otro en la corteza superior. Por su parte, el magmatismo es el proceso que acarrea materia desde el manto litosférico, y aún desde profundidades mayores, a la corteza. En el presente trabajo, se analiza la evolución geológica de los Andes de Bolivia en términos de transferencia de masa tanto de las áreas circundantes como del manto, y se trata de determinar la contribución relativa de cada una de las fuentes.
Fuente:Jiménez N, et al Evolución tectonomagmática de los Andes bolivianos.